Hay muchos escándalos pendientes por resolver y donde el dinero público sigue en manos de los que se lo robaron. El último desfalco al erario ocurrió con los 70.000 millones de pesos de Centros Poblados, contratistas que se quedaron con el anticipo del contrato de Internet para niños pobres adjudicado en Mintic y que seguramente se enredará en las mañosas actuaciones de los actores principales. Dirán que cumplieron parte del contrato, que compraron software y hardware cuyo precio debe ser descontado, más otras actuaciones complementarias tendientes a ejecutar el contrato. Repetirán que ellos sí iban a cumplir. Engaños desde el principio, engaños al final y acuciosos servidores públicos que giraron el anticipo a quienes hoy son imputados por la justicia y tienen medida de aseguramiento. Pero los funcionarios que firmaron deben pagar pues su responsabilidad no se puede eludir con explicaciones de inocencia mal sustentada.
La relación de atropellos en Colombia es grande, y todo en gobiernos de derecha y por eso debemos empezar por los más recordados como Dragacol, Foncolpuertos, Chambacú, Invercolsa, Cajanal, Commsa, Agro Ingreso Seguro, Carrusel de Contratación Bogotá y otras capitales de Colombia. En la gestión de Alejandro Ordoñez fueron sancionados 2.806 funcionarios, entre gobernadores, alcaldes, concejales, diputados y congresistas; mientras que en el periodo de Edgardo Maya (2004-2008) se destituyeron e inhabilitaron para ejercer cargos públicos a 460 funcionarios de elección popular por las mismas razones de su sucesor. Resuenan todavía los escándalos en la DIAN, Dirección de Estupefacientes, Sistema Nacional de Salud (EPS-IPS), Termorrío, Interbolsa, Carrusel de pensiones en el Consejo de la Judicatura, Colpensiones, Reficar, Llanopetrol, cartel de pensiones en Ecopetrol, Cartel de las regalías, cartel de la chatarrización, etc. Entre 1990 y 2022, se han perdido billones de pesos, que el Estado en la mayoría de los casos no ha podido recuperar.
Los partidos políticos en el poder no han asumido responsabilidad alguna, porque recomiendan a sus allegados y luego dan la espalda a todas las acusaciones y después los enganchan en otras posiciones mejores. Son los especialistas en defraudaciones. Hoy esos partidos amenazan con sacar de sus listas a quienes no apoyen a Fico y voten por el Pacto Histórico. Sería bueno que el candidato de la derecha Federico Gutiérrez diera explicación de por qué todos los partidos tradicionales lo respaldan cuando muchos de quienes están en esas toldas han sido acusados de varios de estos fraudes y en algunos casos condenados por la pérdida de los recursos estatales. Ven la paja en el ojo ajeno pero no la viga en el propio. Hoy la memoria colectiva les quiere cobrar por todas esas actuaciones en contra del pueblo y especialmente por no haber castigado a los autores y cómplices vinculados a esas banderas políticas. El cambio en esta generación empieza por derrotar a los corruptos. Ese es el compromiso del pacto histórico.
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